Una lucha ciega

El éxito está determinado por el poder que llegas a alcanzar en algún momento de la vida. Bien material o jerárquico que permite descubrir la verdadera autenticidad y genuinidad de las personas. En la vida diaria nos topamos con individuos que sólo de presencia, nos golpean duro con gestos de arrogancia, invisibilidad y desatino; haciendo notar su "condición superior" con potestad y autoridad.

"El poder conseguido por medios culpables nunca se ejercitó en buenos propósitos". (Tácito)

Uno de los mensajes que nos deja este movimiento social, apunta a esta disparidad y la incapacidad de continuar manteniendo la compostura cuando el esfuerzo es el mismo o mayor, pero nuestra condición socio económica es otra. Colgados en el limbo de una oportunidad, un gran salto o la ilusión de un premio gordo, nos pasamos la vida esperanzados y optimistas sin tener nada en los bolsillos y esperando que "otros" sean responsables del cambio. A fin de cuentas, las figuras del gobierno nunca serán gestores de un cambio sustancial en nuestras vidas. Pudiendo existir diligencias políticas que muevan al País y favorezcan el "crecimiento monárquico", pero nunca como individuos seremos garantes de alguna reforma significativa que cambie de cuajo nuestra situación actual.

"Así aparecerán nuevas figuras y candidatos que nos muevan con cierta suspicacia, pero "la pega", seguirá en nuestras manos".

Es que el ser humano tiene una capacidad inconmensurable de crear, transformar y llevar a cabo todo lo que se proponga si así lo quiere, podemos incrementar nuestro esfuerzo y nuestras garantías serán mayores, pero siempre dentro de nuestra propia escala de logros. Conformes o no, el poder es necesario si lo que quieres es brillar y ostentar con grandeza, podemos por otra parte continuar con nuestra vida a escala formal y cosechar nuestro sustento con humildad. La lucha siempre será con el rival más poderoso, disconformes por querer lo ajeno, por ambicionar lo que otros ostentan, vacilar lo que no somos capaces de alcanzar y sostener ese mecanismo de comparación de forma permanente.

¿Podremos de algún modo lograr vetar la desigualdad en nuestro País? "Con la mirada más optimista, jamás podremos erradicar la condición de aquellos que nacieron privilegiados o lograron anclar a una posición de poder. Despotricar en redes sociales, sostener marchas y movimientos radicales, increpar con rabia y descontento a quienes "nos representan", no cambiara nuestra condición actual, sólo nos hará recordar que nuestra lucha es propia y personal".

Ya se cumple un mes desde la apertura de esta crisis, muchas fueron las demandas escritas y vociferadas en cuanto diseño de creatividad e ingenio existió para traspasar el mensaje al gobierno, sin embargo, la lucha se sostiene sin grandes cambios...varios son los argumentos que validan la imposibilidad de algún tipo de desembolso económico, para sustentar lo inmediato.

“La situación económica es muy compleja y todos debemos ser parte de la solución” Nuestro sistema económico tiene muchísimas virtudes que no se pueden desconocer, pero también problemas relevantes que abordar.

Sin embargo, observo que a pesar de que muchos dicen "empatizar con la causa" y proponen infinidad de acuerdos para resolver el conflicto, no son capaces de "tocar sus bolsillos" y demostrar con coherencia que si están dispuestos a equiparar esta sociedad desigual. Rabia, molestia, pero consciente de no poder hacer más, veo con desazón a aquellos que sostienen sus altos ingresos y predican con "gestos de hermandad e intención solidaria".

"El gasto anual de la Cámara de diputados superó este año los 29 mil 223 millones de pesos. El sueldo de los legisladores en los estados miembros de la OCDE es 2,9 veces el PIB per cápita de cada país. En Chile es de 12 veces".

"El sueldo mínimo de una persona común, el que corresponde a $301.000, está muy lejos de acercarse a los ingresos de los parlamentarios, quienes cuentan con una dieta de $9.349.851 bruto.Aparte de la dieta, los parlamentarios también cuentan asignaciones, las cuales deberían ser rendidas, pero no siempre es el caso. Los diputados reciben $20.592.805 y los senadores $29.591.952. En tanto los ministros de estado y asesores del legislativos, ostentan cifras entre 7 y 9 millones de pesos mensuales".

"Por otro lado se suman las AFP quienes reportaron un alza de sus utilidades de un 70,26% durante este año, totalizando ganancias por sobre los US$551 millones, mientras que la Superintendencia de Salud informó que las utilidades de las Isapres ascendieron a los $64.392 millones"

A evidencia de los hechos nada podemos hacer con el descriterio y la invisibilidad de nuestros requerimientos, por que aquellos son dueños del poder y nosotros sólo miembros de una sociedad invisible y anulada.